La sopa de espinacas puede aumentar considerablemente tu ingesta de hierro y ácido fólico, por eso es cada vez más popular. Si eres un gran aficionado a la sopa de espinacas, pero no te gusta el esfuerzo que supone hacerla, quizá merezca la pena congelarla.
¿Se puede congelar la sopa de espinacas?
Sí, puedes congelar la sopa de espinacas hasta 3 meses. Decanta la sopa de espinacas en tantos recipientes como necesites para congelarla toda, asegurándote de que ningún recipiente esté lleno más de cuatro quintos. Una vez porcionada la sopa, sella los recipientes y congélalos.
¿ Se congela bien? Yes
¿Se puede volver a congelar ? Yes
Cómo congelar la sopa de espinacas
El método de congelación de la sopa de espinacas es similar al de la mayoría de las sopas. Si necesitas conocer el método completo, sólo tienes que seguir estos 5 sencillos pasos:
- Enfriar: El primer paso para congelar sopa de cualquier tipo, no sólo sopa de espinacas, es asegurarse de que la sopa está totalmente fría. Si la sopa no está fría, se formará condensación en el recipiente, lo que provocará la formación de hielo y, a su vez, quemaduras por congelación.
- Prepara los recipientes: Una vez te hayas asegurado de que la sopa está fría, reúne tantos recipientes como creas necesitar. Cada recipiente debe contener una porción de sopa con espacio para expandirse.
- Decanta: Una vez preparados los recipientes, añade la sopa a cada uno, asegurándote de que ningún recipiente individual esté lleno más de cuatro quintos. Recuerda que todo líquido a base de agua puede expandirse hasta un veinte por ciento durante el proceso de congelación.
- Sella: Después de añadir la sopa a los recipientes, coloca las tapas en cada uno de ellos y ciérralos completamente. Asegúrate de que cada una de esas tapas está sellada por completo, de lo contrario, ¡acabarás con un enorme lío en el congelador!
- Congela: Transfiere todos los recipientes al congelador y colócalos a lo largo de las paredes del mismo. No importa el grosor de la sopa, puedes utilizar líquidos para forrar tu congelador, ya que actuarán como un eficaz amortiguador, protegiendo a los demás alimentos.
3 consejos para congelar sopa de espinacas
Ahora que ya sabes cómo congelarla, te ofrecemos 3 consejos que te recomendamos encarecidamente que sigas al congelar sopa de espinacas para obtener los mejores resultados:
Asegúrate de que los recipientes están bien cerrados
Los recipientes deben estar lo más herméticamente cerrados posible para que haya la menor posibilidad de que se produzca algún tipo de derrame en tu congelador. Comprueba los recipientes una vez más antes de meterlos en el congelador. Si te preocupa, mételos en una bolsa o envuélvelos en una lámina de film transparente.
Añade la menor cantidad posible de lácteos
Los lácteos grasos son algo que, notoriamente, se congela muy mal. Por eso, evita añadir nata o crema fresca a la sopa antes de congelarla, ya que pueden romperse y dar a la sopa un sabor y una textura pobres al descongelarla.
Utiliza la sopa para forrar el congelador
Utilizar la sopa para forrar el congelador puede ser una barrera eficaz contra las quemaduras por congelación, lo que significa que puedes proteger fácilmente los alimentos más quemables del congelador, como la carne y las verduras.
¿Cuánto tiempo se puede congelar la sopa de espinacas?
Puedes congelar la sopa de espinacas durante unos tres meses.
Transcurrido ese tiempo, aún se podrá comer, pero es probable que algunos de los compuestos aromáticos se hayan disuelto en la escarcha del congelador, lo que dará lugar a una comida insatisfactoria.
También te darás cuenta de que, con el tiempo, la textura se vuelve cada vez más granulosa. En lugar de tener una sopa suave como la seda, la textura puede volverse inconsistente.
Las sobras de sopa de espinacas pueden conservarse en el frigorífico entre 4 y 5 días si se guardan en un cuenco tapado o en un recipiente hermético tipo Tupperware.
¿Cómo se descongela la sopa de espinacas?
La forma más fácil de descongelar la sopa de espinacas es abrir un poco la tapa del recipiente para crear una rejilla de ventilación antes de calentar la sopa en el microondas en intervalos de treinta segundos hasta que esté bien caliente.
También puedes meter la sopa en el frigorífico para que se descongele lentamente durante la noche.
Puedes optar por el método realmente rápido de recalentarla congelada o por el método realmente lento de descongelarla en el frigorífico. No debes ir por el camino del medio e intentar descongelarla a temperatura ambiente.
¿Se puede volver a congelar la sopa de espinacas?
Sí, puedes volver a congelar la sopa de espinacas, ya que no contiene carne ni aves y no se estropeará por la congelación repetida. Esto se aplica a una sopa de espinacas normal y corriente en la que las espinacas son el ingrediente principal.
Si has hecho una sopa de espinacas con lácteos, por ejemplo, volver a congelarla no sería una buena idea.
¿Se congela bien la sopa de espinacas?
Sí, la sopa de espinacas se congela bien. Con el tiempo, la textura y el sabor de la sopa no se verán dañados por la congelación, descongelación o recongelación. De hecho, te costará distinguir entre un tazón de sopa de espinacas fresca y uno congelado.
Preguntas frecuentes relacionadas
Si aún tienes preguntas sobre la congelación de la sopa de espinacas o de la sopa en general, éstas pueden ayudarte:
No, por desgracia, no todas las sopas se congelan bien. Si la sopa de espinacas contiene quinoa, arroz, pasta o patatas, la textura puede cambiar completamente en el congelador.
Aunque se puede congelar, tendrás un problema de texturas al congelar sopa de espinacas que contenga queso (o cualquier producto lácteo en realidad). Siempre que sea posible, añade el queso después de congelarla y descongelarla.