La lasaña es una de las comidas familiares más queridas. Las láminas de pasta fina se combinan con un sabroso ragú, una cremosa salsa bechamel y queso fundido: ¡qué más se puede pedir! Pero, ¿cuál es la mejor forma de conservar este plato familiar favorito?
¿Se puede congelar la lasaña?
Sí, puedes congelar la lasaña hasta 3 meses. Lo mejor es congelar la lasaña antes de cocinarla. Cuando hayas preparado la lasaña en una fuente, envuélvela y métela en el congelador. Congélala en la fuente en la que vayas a cocinarla.
¿ Se congela bien? Yes
¿Se puede volver a congelar ? Yes
Cómo congelar la lasaña
En definitiva, ¡no hay una forma correcta o incorrecta de congelar la lasaña! Este sustancioso plato italiano se puede congelar por partes, antes de hornearlo o después de cocinarlo por completo. Es una receta perfecta para preparar con antelación, ya que se congela muy bien.
A continuación te explicamos cómo conservar en el congelador tanto la lasaña cruda como la cocida, para que puedas decidir cuál es el mejor método para ti. Desde el punto de vista del sabor y la frescura, congelar la lasaña antes de cocinarla es probablemente la mejor opción, ¡pero depende de ti!
Esto es lo que tienes que hacer para congelarla correctamente:
Cómo congelar lasaña cruda
Esta es la mejor forma de congelar la lasaña. Si puedes elegir, opta por la cruda y sigue estos pasos:
- Monta lalasaña: Monta la lasaña como lo harías normalmente(nuestra receta es deliciosa). Si utilizas una salsa bechamel caliente, deja que se enfríe antes de cubrir las láminas de lasaña.
- Envuélvelaen papel de aluminio: Una vez montada la lasaña, cubre bien la fuente con papel de aluminio para que no queden huecos. A continuación, introduce la lasaña en una bolsa apta para el congelador del tamaño adecuado para protegerla mejor de las quemaduras del congelador.
- Etiqueta y congela: Escribe la fecha de hoy y la fecha de caducidad en la bolsa, y coloca la lasaña sobre una superficie plana en el congelador.
Cómo congelar la lasaña cocida
Si ya has cocinado la lasaña y sólo quieres guardar las sobras en el congelador, sigue este procedimiento:
- Enfriar: Saca la lasaña del horno y déjala reposar sobre la encimera hasta que se enfríe por completo. No tengas la tentación de precipitarte en este proceso, ya que las láminas de lasaña se pondrán blandas si las congelas cuando aún están calientes.
- Porciona y envuelve: Si vas a congelar las sobras de lasaña, es una buena idea porcionarlas en esta fase, para que puedas sacar fácilmente del congelador la ración que necesites cuando la necesites.
- Etiqueta y congela: Escribe la fecha de hoy y la fecha de caducidad en la bolsa, y coloca la lasaña sobre una superficie plana en el congelador.
3 Consejos para congelar lasaña
Ahora que ya sabes cómo congelarla, te damos 3 consejos que te recomendamos encarecidamente que sigas al congelar lasaña para obtener los mejores resultados:
Congela la lasaña cruda para obtener mejores resultados
Aunque congelar una lasaña cocida no tiene nada de malo, congelar una lasaña cruda es una opción mucho mejor. Esto se debe a que los ingredientes sufren menos cambios estructurales, y tu lasaña estará súper fresca y sabrosa cuando la hayas cocinado.
Cocinar desde congelado
Otra ventaja añadida de congelar la lasaña cruda es que puedes cocinarla directamente desde el congelador. No tienes que preocuparte de descongelarla, lo que te ahorra tiempo en la cocina.
Deja suficiente tiempo de cocción
Aunque no es necesario descongelar la lasaña antes de cocinarla, una lasaña congelada suele requerir el doble de tiempo en el horno hasta que esté suficientemente cocida. Por tanto, asegúrate de dejar tiempo suficiente si vas a cocinar una lasaña congelada desde cero.
¿Cuánto tiempo se puede congelar la lasaña?
Puedes congelar la lasaña durante unos tres meses. Algunas personas la congelan durante más tiempo, pero tres meses es lo ideal si quieres asegurarte de que no pierde nada de su delicioso sabor.
No importa si la lasaña está cocida o cruda: aguantará perfectamente en el congelador hasta tres meses.
Una vez cocida y enfriada, puedes conservar la lasaña en el frigorífico entre 3 y 5 días. Puedes guardarla en la fuente en la que se cocinó, cubierta con una lámina de papel de aluminio.
¿Cómo se descongela la lasaña?
Como ya hemos dicho, no es necesario descongelar la lasaña antes de cocinarla. Sin embargo, si quieres hacerlo, la mejor forma de descongelarla es colocándola en el frigorífico.
La lasaña tardará más de 10 horas en descongelarse completamente, por lo que es mejor sacarla del congelador la noche anterior a la que planees disfrutarla. No debes descongelar la lasaña a temperatura ambiente, ya que contiene carne y lácteos.
¿Se puede volver a congelar la lasaña?
Puedes volver a congelar la lasaña una vez. Cuando vuelvas a congelar cualquier tipo de alimento, debes tener en cuenta cómo lo guardas.
Para volver a congelar la lasaña con seguridad, debes asegurarte de que has guardado las sobras en el frigorífico y no a temperatura ambiente. No recomendamos congelarla más de una vez, ya que es probable que la textura de las láminas de lasaña se deteriore.
¿Se congela bien la lasaña?
Sí, la lasaña se congela excepcionalmente bien. De hecho, es uno de los mejores platos para preparar con antelación y congelar. Siempre es mejor congelar la lasaña cruda, pero se congelará muy bien si ya la has montado y cocinado.
Receta de lasaña para congelar
Si buscas una receta sencilla de lasaña que puedas congelar fácilmente, ésta es la tuya. Si sigues esta receta para congelarla, sigue todos los pasos hasta el momento de cocinarla.
Es mejor que congeles la lasaña sin cocinar, ya que la textura no se verá tan afectada. Aquí tienes nuestra receta de lasaña apta para congelar:
Preguntas frecuentes relacionadas
Si aún tienes preguntas sobre la congelación de la lasaña o sobre la lasaña en general, éstas pueden ayudarte:
Congelar la lasaña cruda es mejor que congelarla cocida, porque se producen menos cambios de textura. De hecho, si congelas una lasaña cruda y luego la cocinas, sufrirá tan pocos cambios que te costará decir que estuvo congelada.
Puedes congelar lasaña hecha con láminas de pasta seca o fresca y, una vez congelada, es poco probable que notes ninguna diferencia, independientemente del tipo de pasta que hayas utilizado.
Sí, puedes congelar la mayoría de las lasañas compradas en la tienda, pero lo mejor es que compruebes el envase, ya que suele indicar si es apta o no para congelar en casa.