El té de burbujas se originó en Taiwán a principios de la década de 1980. Suele consistir en té acompañado de bolitas de tapioca masticables. Ahora es muy popular en muchos países occidentales y, con un poco de gastronomía molecular, ¡incluso puedes prepararlo en casa! Pero, ¿cómo se conserva?
¿Se puede congelar el té de burbujas?
Sí, puedes congelar el té de burbujas durante unos meses. No puedes congelar una bebida ya preparada, pero puedes congelar las bolas de tapioca que componen el té de burbujas.
¿ Se congela bien? Sometimes
¿Se puede volver a congelar ? No
Cómo congelar el té de burbujas
Aunque hay muchos sabores distintos de té de burbujas y de las bolas que lo componen, las bolas de tapioca negra son las favoritas.
A efectos de este artículo, las utilizaremos como ejemplo. Si tienes demasiadas bolas de tapioca o quieres que duren más, congelarlas es una opción estupenda.
Esta técnica te permitirá conservar tus Perlas de Tapioca Boba cocidas durante más tiempo, manteniendo su masticabilidad y consistencia:
- Hacer bolas de tapioca
Haz y cuece tus bolas de tapioca según tu receta favorita. - Deja enfriar
Una vez cocidas las bolas de tapioca, déjalas enfriar completamente antes de congelarlas. - Embolsar
Mete las bolas de tapioca cocidas y frías en una bolsa ziplock apta para el congelador. - Exprime
Saca todo el aire de la bolsa y ciérrala por arriba. - Etiqueta
Escribe el contenido y la fecha de congelación en la bolsa para que sepas exactamente lo que hay dentro y la fecha en que debe utilizarse. - Congela
Mete las bolsas ziplock en el congelador, lo ideal es colocarlas planas para aprovechar al máximo el espacio del congelador.
3 consejos para congelar el té de burbujas
Ahora que ya sabes cómo congelarlo, tenemos 3 consejos que te recomendamos encarecidamente que sigas al congelar el té de burbujas para obtener los mejores resultados:
Deja que se enfríe bien
Meter cualquier cosa caliente en el congelador es una receta para el desastre. Asegúrate de enfriar bien las bolas de tapioca para que se congelen en las mejores condiciones posibles.
Porcionar
Puede merecer la pena dividir las bolas en porciones para descongelarlas en lotes más pequeños si vas a preparar infusiones individuales. Así ahorrarás tiempo y evitarás desperdiciar comida.
Prueba otros sabores
Las bolas de té burbuja vienen en todo tipo de sabores, así que experimenta con sabores exóticos como el lichi, el mango o la naranja para que tu té burbuja sea aún mejor.
¿Cuánto tiempo se puede congelar el té de burbujas?
Es difícil decirlo con una cifra concreta, pero las bolas de tapioca congeladas deberían durar unos meses en el congelador. Esto es mucho, mucho más tiempo del que durarían en el frigorífico o a temperatura ambiente, por lo que es un buen método de conservación.
Puedes congelar el té de burbujas hasta 3 meses
¿Cómo se descongela el té de burbujas?
Descongelar las bolas de tapioca es un proceso un poco complicado, pero te asegurará que estén perfectas para tu té de burbujas.
En primer lugar, pon a hervir agua en un cazo pequeño y vierte las bolas de tapioca congeladas en el agua. Remueve de vez en cuando y cuece las bolas de tapioca durante unos 5 minutos; retíralas del fuego y déjalas reposar otros 5 minutos. A continuación, escurre el agua de la cacerola y pasa las bolas de tapioca por agua tibia.
A continuación, puedes utilizar las bolas en el té o colocarlas en un cuenco y cubrirlas con un jarabe de azúcar para conservarlas hasta que sea necesario utilizarlas.
¿Se puede volver a congelar el té de burbujas?
No, no puedes volver a congelar las bolas de tapioca una vez cocidas de nuevo. Lo mejor es congelar las bolas en porciones individuales, suficientes para un té cada vez, para que no tengas que volver a congelar nada.
¿Se congela bien el té de burbujas?
Aunque el proceso de congelación y descongelación es un poco complicado, las bolas de tapioca utilizadas para el té de burbujas se congelan bien si se hace correctamente.
Normalmente, cuando las bolas de tapioca se guardan a temperatura ambiente o en el frigorífico, sólo duran un par de horas. Por tanto, congelar las bolas de tapioca sobrantes es la mejor forma de conservarlas, sobre todo si no vas a utilizarlas con frecuencia.